Marrakech es una ciudad muy caótica, pero a la vez colorida y mágica.
Hoy quiero compartir con vosotros la ruta que yo hice. Ya es la segunda vez que la visito la ciudad y sin duda mi experiencia fue mejor que la primera. Si algo tenéis que saber es que los marroquís siempre van a intentar venderte algo o pedirte dinero como sea, al principio puede ser divertido regatear, pero terminas harto. Tres días en Marrakech son más que suficientes para hacerte a la idea de sus costumbres y su cultura.
Los contrastes en Marrakech son muy exagerados, la ciudad nueva podría ser perfectamente una ciudad europea mientras que la ciudad antigua, La Medina, es un laberinto de olores, colores y sabores donde te puedes perder fácilmente por sus calles. Si queréis vivir una experiencia más auténtica y divertida, mi recomendación es alojarse en un RIAD (es una casa de 3 pisos máximo con un patio interior) dentro de la medina. Además, es una oportunidad para conocer su hábitos y estilo de vida. Nosotros nos alojamos en el Riad Chamali y nos encantó.
¿Qué ver en Marrakech en 3 días?
Día 1: Zocos, Plaza Jemma el Fna y Madraza de Ben Youseff
Empezamos el día en la plaza Rahba Kedima, hacia la ruta por los zocos. Es un poco difícil encontrar todos los zocos pero yo os recomiendo que vayáis andando y os los encontrareis a medida que avancéis. Siempre que pidáis ayuda, van a esperar una recompensa económica por lo que si no lo veis claro id a vuestro rollo o simplemente no deis nada, no es obligatorio, aunque se enfaden.
Entre los zocos que visitamos están
Sebbaghine (zoco de los tintoreros) donde podréis ver como tiñen las lanas y las dejan a secar para luego confeccionar
Chouari es donde encontrareis todo tipo de cestos coloridos, básicos y mil diseños.
Smata (zoco de las babuchas) encontrareis miles de babuchas (zapatos típicos) de diferentes colores y diseños.
El Zoco Btana, especializado en pieles, bolsos, maletas, chaquetas, muebles etc… Si os hace ilusión visitar las tintorerías preguntar por la calle pero tener en cuenta que os van a hacer pagar por ello, aquí solo os va a quedar regatear. Si habéis visitado Fez o tenéis pensado pasar por Fez, no perdería el tiempo en ver las de Marakech, son muy pequeñas.
En Ableuh, encontraréis la zona de las aceitunas y los encurtidos.
Mellah es el corazón del barrio judío y donde encontrareis miles de especies. En general aquí la gente es más amble y no se enfadan si no les compras nada.
Si el hambre os aprieta, por la zona encontrareis dos restaurantes que me gustaron mucho, situados en la plaza Rahba Kedima. Café des especies y Nomad.
Por la tarde podéis ir a visitar la Madraza de Ben Youseff (escuela musulmana de estudios superiores), el edificio y los mosaicos son preciosos. Cuando ya se acerque el atardecer, dirigiros a la plaza principal de la Medina, Jemma el Fna. Dar un paseo por la plaza es interesante, es un caos total, con muchísimos chiringuitos de comida y zumos de frutas, espectáculos de música y animales como monos y cobras. Yo no os recomiendo pagar ni por las serpientes ni por los monos, a saber todas las bacterias que deben llevan.
Después de todo el día andando, podéis relajaros en la terraza del restaurante Le gran Balcón Café Glacier, tomar algo y contemplar la puesta de sol y las vistas de la plaza. Después podéis o bien cenar por los chiringuitos de la plaza o ir a los miles de restaurantes que hay por sus alrededores. Nosotros cenamos en Kasbah café.
Día 2: Edificios Emblemáticos, Barrio Dar el Bacha y Mezquita de la Kutubia
Empezamos el día con un poco de visita cultural. Aunque yo no soy muy fan de estas visitas, los edificios de Marrakech son realmente bonitos y es interesante visitarlos para aprender sobre la cultura y costumbres.
Nosotros visitamos el Palacio de la Bahía (es uno de los Palacios más bonitos con más de 150 habitaciones), el mueso textil de Dar si said, la Tumbas Saadies (donde se encuentran 100 tumbas decoradas con mosaicos) y Le jardín Majorelle (propiedad de Yves Saint Laurent). Todas estas visitas no son imprescindibles pero si recomendables al menos si es vuestra primera visita en Marrakech.
Por la zona podéis parar a comer en el restaurante la Famille, el lugar es monísimo y la comida esta riquissima. Toda la comida es orgánica, lo que nosotros llamamos comida healthy.
Por la tarde podéis ir por la zona de Dar el Bacha, es un barrio que está muy de moda entre los europeos con restaurantes y hoteles más glamurosos y caros también. También podéis ir a ver la Mezquita de la Kutubia, la mezquita más emblemática de la ciudad (pero no podéis acceder si no sois musulmanes) e ir a tomar algo en el hotel más espectacular de la medina, La Mammounia.
Para finalizar bien el día, nosotros fuimos a cenar en el restaurante Comptoir Darna. Restaurante muy TOP que se convierte en bar de copas y donde hay espectáculo de danza del vientre. No es económico pero si os apetece hacer un plan distinto o tomar un buen gin-tonic (cosa difícil dentro de la medina) os lo recomiendo.
Día 3: la ciudad nueva, El Palmeral y experiencia Hammam
Ultimo día antes de despedirnos de Marrakech. Después de dos días muy intensos dentro de la medina, regateando todo el día y alucinando con cada rincón y callejuela, visitamos la ciudad Nueva. Podéis ir andando perfectamente desde la medina. El contraste entre la ciudad nueva y vieja es brutal.
Aunque es una zona nueva, prefiero mil veces más la Medina, por su autenticidad. Si os apetece un heladito siempre podéis hacer una parada en la heladería Dino, los helados están buenísimos.
Por la tarde podéis hacer la visita al Palmeral. El Palmeral de Marrakech tiene más de 100.000 palmeras. Podéis hacer la visita en coche de caballos y una vez allí podéis hacer alguna excursión en camello o quad. Antes de la cena podéis aprovechar para relajaros en un Hammam (spa) típico, Le Bains de Marrakech. Nos recomendaron otros com La sultana o Royal Mansour, pero son algo mas caros.
Espero que mi ruta os haya sido útil para planificar vuestro viaje.